Los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año
Los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año
Fantásticos paisajes naturales, ciudades vibrantes, magníficas obras de arte y pintorescos poblados a la orilla del mar, esas son algunas de las experiencias que ofrece Norteamérica para celebrar navidad y fin de año.
Los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año
Si en navidad y fin de año quieres estar en contacto con la naturaleza, pero al mismo tiempo disfrutar del ambiente cosmopolita de sus ciudades la opción perfecta para ti es Canadá del Este.
Pero si lo que buscas son metrópolis históricas, repletas de museos, con una vasta oferta de actividades artísticas, explora el este de Estados Unidos.
Aquellos que prefieren huir del frío en navidad y año nuevo, el sur de Quintana Roo, los sorprenderá con una mágica laguna, así como un antiguo pueblo de pescadores.
Canadá: Naturaleza y vibrantes metrópolis
Cataratas del Niágara, uno de los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año
Su riqueza histórica, su modernidad, su atmósfera europea, su vasta oferta cultural y sus enormes bosques, han convertido a Canadá del Este en una región imperdible cuando se visita el país de la hoja de maple. Y en navidad y año nuevo, sus ciudades y atractivos naturales parecen salidos de un cuento de navidad.
La primera parada son las cataratas del Niágara, en la provincia de Ontario. Durante el invierno, este grupo de cascadas, ubicadas en la frontera entre Estados Unidos y Canadá, se congelan creando uno de los paisajes más increíbles del mundo.
Para admirar la magnificencia de este lugar, la mejor opción es un tour en helicóptero. Sobrevolarás la planta de energía Sir Adam Beck y la Escuela de Horticultura de la Comisión de Parques de Niágara.
Después continuarás por río Niágara y podrás admirar los Whirlpool Rapids y el Puente Rainbow.
Ya sobre el río se asoman las cataratas Americanas y Herradura de Caballo, ambas congelas durante el invierno.
Después de disfrutar de la belleza natural de las cataratas, escápate a Ottawa. Esta ciudad, durante años, fue un pequeño pueblo de leñadores, pero hace más de 150 años, la reina Victoria designó a la ciudad como capital permanente de Canadá. Así fue como Ottawa se convirtió en una urbe cosmopolita cargada de historia y arte.
Disfruta de grandes tours en Ottawa en navidad y fin de año.
Y así comenzó a posicionarse como la capital cultural de Canadá y, luego, como un sitio idóneo para conocer las raíces canadienses.
Entre sus imperdibles están Museo Canadiense de Historia, la Galería Nacional, el Museo Canadiense de la Naturaleza y el Centro Nacional de las Artes.
También vale la pena visitar parque Gatineau, Parque Jacques Cartier, Nordik Spa-Nature y el centro de esquí Camp Fortune.
Pero, sin duda, uno de los grandes atractivos en navidad y fin de año es el Rideau Canal Skateway, considerada la pista de hielo más larga del mundo. El recorrido inicia en el centro de la ciudad y va hacia el sur, al Dow’s Lake Pavilion.
Un lugar que parece sacado de un cuento de navidad es la ciudad de Quebec. Y es que las calles, plazas y casonas afrancesadas del Viejo Québec, parecen dar vida a una villa navideña, donde dicen todos los sueños se cumplen.
Quebec, el destino ideal para celebrar navidad y fin de año.
Lo cierto es que la zona antigua, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, en navidad y año nuevo adquiere una atmósfera muy singular, que permite a los viajeros transportarse a un pasaje de un cuento.
La ciudad amurallada o el Viejo Québec está dividido en dos: la Haute Ville y Basse Ville. La primera es la ciudad alta, situada sobre el Cap Diamant, un promontorio rocoso, que a pesar del transcurrir de los siglos aún conserva su atmósfera europea.
La muralla todavía tiene cuatro puertas, y en Saint-Jean, ubicada en la plaza D´Youville, es posible desplazarse hacia diversos puntos de interés, como el Parque de I´Artillerie con sus edificios históricos; el museo de la América Francesa, ubicado en el Seminario, y el de la Ursulinas.
La basílica Notre Dame de Québec, alberga diversas obras de arte y en su cripta están enterrados cuatro gobernadores de Nueva Francia, como se le nombró antiguamente.
Otro de los atractivos de la zona es la Ciudadela, conocida como el Gibraltar de América: el fuerte más grande construido en Canadá bajo el dominio británico.
También ameritan una visita el Castillo Frontenac y Terrassa Dufferin, una explanada sobre los acantilados de Cap Diamant. Desde este lugar se puede tomar el funicular que lleva a Basse Ville, conocida como la parte baja de la ciudad o descender por una de las escaleras hacia sus estrechas calles.
Ya en Basse Ville, sus barrios van cautivando a los visitantes y el Petit Champlain con sus dos calles más peculiares, Petit Champlain y Sous le Cap, invita a perderse entre sus tiendas, cafés y restaurantes.
Estado Unidos: travesía por grandes ciudades
Celebra la navidad y fin de año en Nueva York.
Descubre los escenarios donde se gestó la historia de este país, algunos de los mejores museos del mundo y hasta los rincones más exquisitos de Estados Unidos.
La primera parada es Nueva York, una ciudad a orillas del río Hudson que cautiva a todo aquel que la explora de día y de noche.
Aquí entre rascacielos modernos e históricos, museos y galerías de arte, barrios populares y exclusivos, se va descubriendo este rincón estadounidense, también conocido la ciudad que nunca duerme.
Entre sus atractivos imperdibles está Central Park, Museo de Arte Moderno de Nueva York, One World Observatory y el Museo Americano de Historia Natural.
También sobresalen la Catedral de San Patricio, el Museo Solomon R. Guggenheim, High Line Park, el puente de Brooklyn y la Estatua de la Libertad.
Ahora es momento de escaparse a Washington D.C. Y es que la capital de Estados Unidos está llena de anécdotas, muchas de ellas políticas, pues sus edificaciones gubernamentales, calles y hasta restaurantes han visto desfilar, casi, a presidentes de, casi, todo el mundo.
Los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año están en Washington D.C.
Descubre la Casa Blanca, El Capitolio, el Lincoln Memorial, el Roosevelt Memorial, la Galería Nacional de Arte y el monumento a Washington.
Otros sitios interesantes son el Museo del Holocausto y el Instituto Smithsoniano formado por 17 de los mejores museos de Estados Unidos.
Después de explorar sus edificios públicos, sus museos y sus monumentos históricos, escápate a Georgetown, uno de los barrios más visitados en Washington D.C.
La última parada es Boston. Reconocida como un importante centro cultural e intelectual a nivel mundial, esta ciudad es más que sus famosas universidades, es uno de los lugares más histórico de Estados Unidos. Fue aquí donde el 16 de diciembre de 1773, se llevó a cabo el denominado Boston Tea Party, en el que más de 100 estadunidenses lanzaron al mar todo un cargamento de té, proveniente de Inglaterra. Hecho que marcó el inicio de la guerra de independencia el 4 de julio de 1776.
Hoy, la capital del estado de Massachusetts, está llena de contrastes, pues ha logrado una mezcla entre lo moderno y lo antiguo, característica que no sólo se percibe en sus edificaciones, sino también en su gente.
Si quieres vivir el lado más histórico de Boston, sigue el Freedom Trail, este sendero de la libertad inicia en el Boston Common que presume orgulloso su duomo dorado y sigue por el histórico Faneuil Hall, conocido también cuna de la libertad, ya que en 1742 era utilizado como centro de reuniones.
También amerita una visita la calle Newbury, que, en medio de sus elegantes boutiques de diseñadores de renombre, sus cafés, los bares exclusivos y sus más de 50 galerías de arte, destaca la arquitectura estilo europeo de sus históricas edificaciones.
Otro de los sitios ideales para las compras es Charles Street, donde se pueden encontrar establecimientos con antigüedades hasta grandes Malls como Prudential y Copley.
México: escapada a Bacalar y Mahahual
Bacalar, uno de los mejores tours para escaparte en navidad y fin de año.
Ubicados al sur de Quintana Roo, estos dos destinos invitan a los viajeros a descubrir la belleza natural de estas tierras del sureste mexicano.
La primera parada es Bacalar, un poblado que a lo largo de su historia ha sido blanco de ataques de piratas ingleses, holandeses y franceses. Pero no solo ellos quisieron apoderarse de aquellas tierras, también los mayas rebeldes y los mayas cruzoob.
Hoy, Bacalar se resiste a hacer conquistado, pues sabe que ahora puede conquistar a todo aquel que lo visita.
Y lo está logrando. Solo basta caminar por sus calles y admirar sus coloridas construcciones, explorar El Fuerte San Felipe o sumergirse en su laguna de siete colores para que entiendas porque este lugar ha sido conquistado y conquistador.
Las huellas de su pasado se admiran desde cualquier punto del pueblo. Desde el muelle donde salen embarcaciones para desvelar la segunda laguna más grande de México, se ve, a distancia, un cañón que antes desafiaba a los piratas, y que, actualmente, atrae a propios y extraños deseos de tocarlo.
No solo esa pieza de artillería llama la atención de los visitantes, también el Fuerte San Felipe, construido en 1733 con la finalidad de proteger al poblado de los constantes saqueos de piratas.
El recorrido por la historia también incluye la Parroquia de San Joaquín, la Casa Internacional del Escritor, la Casa de Cultura y la Plaza Principal.
Pero, sin duda, su estrella es la Laguna de siete colores, considerada la segunda más grande del país. Este cuerpo de agua debe su fama a sus siete tonalidades.
Ahí es posible esnorquelear, bucear, paseos en kayak, nadar, pero, sin duda, dicen los lugareños, recorrer los 50 kilómetros de la laguna en lancha permite a los visitantes admirar la variedad de tonalidades que van desde los verdes tenues hasta los azules intensos.
Durante el recorrido te irás internando por pequeños canales rodeados por la exuberante vegetación, y mientras te cuentan historias y leyendas de piratas.
Después de conocer sus increíbles atractivos, puedes escaparte a Mahahual, un rincón donde podrás disfrutar del sol, la arena y del mar Caribe sin mayores pretensiones ni distractores. Si bien, Mahahual es un destino relativamente nuevo que apenas cuenta con algunos pequeños hoteles, pero eso sí, una muy esmerada atención.
La vida marina en la zona es abundante y muy variada, ideal para asombrarse descubriéndola con diversas actividades acuáticas que van del esnórquel a la pesca controlada.
La gastronomía, muy local, también es un valor agregado que ofrece Mahahual. Además, en el muelle de cruceros hay divertidos bares.
